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¿Qué número quieres calcular?

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Cómo usar la calculadora

Tabla de contenidos
  1. Calculadora
  2. Cómo usar la calculadora
  3. ¿Cómo calcular la numerología de tu nombre?
  4. Segundo paso: sumar los números
  5. Variante: número del alma y del destino
  6. Cómo valorar el resultado

Si estás buscando una calculadora online y sientes gran curiosidad por saber qué es lo que se esconde detrás de tu nombre, has llegado al sitio adecuado, aquí podrás encontrar el mejor simulador de numerología que te permitirá conocer qué número eres y las características que están asociadas con él mismo.

Para utilizarla sólo debes introducir tu nombre completo, es decir, nombre propio y los dos apellidos, si los tienes, y la calculadora de numerología te arrojará el resultado de manera automática y sin mayores esfuerzos.

¡Descubre ya qué número eres y qué futuro te espera por ello!

Si en cambio quieres aprender a calcular la numerología sin ayuda de la calculadora también te contaremos todo lo que necesitas saber y cómo interpretar los resultados, coge papel y lápiz y prepárate para aprender lo que nunca te contaron sobre la ciencia oculta de los números.

¿Cómo calcular la numerología de tu nombre?

La numerología sostiene que el valor numérico que corresponde a tu nombre es capaz de influir en algunos aspectos de tu desarrollo personal y profesional.

Calcular tales números basándote en los fundamentos de la numerología puede ayudarte a conocerte mejor a ti mismo, hacerte consciente de tus fortalezas, debilidades, así como de los talentos que puedes explotar.

Por otra parte, si empleas dichos cálculos también para tus parientes y amigos, adquirirás herramientas que te ayudarán a comprenderlos mejor.

Primer paso: Asignar números a las letras qué componen tu nombre propio

1. Escribe el alfabeto de la A hasta la Z en un papel en línea horizontal. A cada una de las 26 letras escríbele al lado el número que le tocaría entendiendo que vamos a seguir un orden alfabético y que A es uno, es decir, el primero, B es dos y así sucesivamente.

2. ¡Alto ahí! No es lo que parece, este primer paso es para comprobar que has escrito las 26 letras y no has obviado ninguna, el número que le vamos a conceder a cada una de ellas es distinto, sigue leyendo y te explico cómo.

Ahora vamos a asignar un número del uno al nueve a cada letra del alfabeto. Con un papel, escribe los números del uno al nueve en línea ascendente, después escribe al lado del número uno la letra A, al lado del número dos la letra B, al lado del número 3 la letra C y así sucesivamente.

Después de haber escrito la letra I al lado del número 9, vuelve a empezar desde el principio, es decir, la próxima letra, la J, escríbela de nuevo en la fila del número uno, a la derecha de la letra A.

Sigue este orden, según el cual la K irá con el número dos, la letra L con el número tres, etc. hasta que acabes el abecedario.

Si te ha parecido un poco engorroso el proceso, no te preocupes que por aquí te dejamos esta tabla para que puedas guiarte sin hacer todo el trabajo sucio:

1

2

3

4

5

6

7

8

9

A

B

C

D

E

F

G

H

I

J

K

L

M

N/Ñ

O

P

Q

R

S

T

U

V

W

X

Y

Z

3. Ahora escribe tu nombre entero, con uno o dos apellidos dependiendo de tu país.

Si la versión oficial de tu nombre incluye prefijos, sufijos, diminutivos, etcétera. Inclúyelos de manera exacta para obtener un cálculo correcto.

Si has cambiado legalmente tu nombre, usa tu nombre nuevo, dado que es este el que se identifica actualmente contigo.

También puedes utilizar tu sobrenombre si así lo deseas, pero el resultado obtenido puede no ser del todo exacto.

4. Encuentra la correspondencia entre las letrasque componen tu nombre y los númerosque le hemos atribuido antes en el alfabeto.

Ahora que ya conoces cuál es el valor numérico de cada letra, puedes escribirla debajo de cada una de las que componen tu nombre. Si tiene 12 letras escribe sus correspondientes 12 números.

Si, por ejemplo, te llamas Luis García, tus números serán los siguientes:

L

U

I

S

G

A

R

C

I

A

3

3

9

1

7

1

9

3

9

1

Segundo paso: sumar los números

Este paso lo hemos explicado para obtener el número de la personalidad, más abajo te explicamos las variantes para obtener el número del alma y del destino.

1. Suma todos los números que han sido atribuidos a las letras consonantes que componen tu nombre.

Usa la calculadora o simplemente papel y lápiz, sumando cada cifra individual obtenida, siempre que corresponda a una letra consonante.

El resultado será normalmente un número compuesto por dos cifras, en raras ocasiones este número tendrá tres cifras, esto solo podrá suceder si tu nombre es muy largo.

2. Reduce el número de dos cifras a uno de una sola, recuerda que la numerología solo contempla resultados de uno a nueve.

Después de haber sumado todos los números que corresponden a las letras que forman tu nombre completo, habrás obtenido un resultado de dos cifras. Para reducirlo, suma las dos cifras que lo componen.

En caso de que dé un número mayor a 9, vuélvelos a sumar ambos hasta qué te quede sólo uno; en caso de qué te salga el 14, el número de personalidad será el 5.

Por ejemplo, si la suma calculada es 25, separa el dos del cinco para luego sumarlos: 2 + 5 tiene como resultado siete.

Esto significa que el número de tu personalidad es el siete.

3. Algunos números no tienes qué sumarlos, son los llamados números maestros.

Si el resultado de sumar las cifras que corresponden a las letras de tu nombre es un número cuyos dígitos son todos iguales, significa qué tienes un número maestro.

Algunos ejemplos de este resultado son por ejemplo 11, 22 o 33. Tienen el poder de atribuirte cierta complejidad y profundidad. A todos estos números se le atribuyen características peculiares.

Variante: número del alma y del destino

Este sistema no sólo puede ayudarte a entender mejor tu personalidad, sino que también se puede valorar para conocer mejor el interior de una persona, incluyendo deseos y motivaciones (número del alma) y para obtener una idea del destino que el alma firmó para marcar nuestro camino en la vida terrenal (número del destino).

Para obtener éstas dos variantes numerológicas, debes seguir los pasos anteriores aplicando ligeras variaciones en el segundo paso.

Cómo valorar el resultado

Una vez hayas descubierto que número está ligado a tu nombre, puedes seguir un análisis detallado de los resultados fijándote en una tabla numerológica.

Esto es todo lo que necesitas saber sobre la ciencia oculta de los números basada en los nombres, pero como bien sabrás no es el único tipo de numerología, también está la tántrica, entre otras, qué es otra rama de la misma basada en el análisis de tu día de nacimiento.

Nosotros hemos preparado para ti un resumen de las características más importantes de cada número del 1 al 9, más el número maestro, que encontrarás a continuación. Compara tus resultados con los de tus familiares y amigos y disfruta de la numerología en todo su esplendor.

Eso sí, antes de continuar debes tener en cuenta que la numerología es una pseudociencia no demostrada, ni demostrable, así que te recomendamos tomar con cautela los datos que te acabamos de dar. Recuerda es referencial.

Tómatelos como una orientación sin base empírica, piensa que, aunque muchas veces acierte, es casi imposible desarrollar un método con carácter tan general y capaz de arrojar resultados que encajen con todo tipo de personas.

NÚMEROS MAESTROS: 11, 22, 33

Como hemos comentado antes, estos números no se reducen, ya que se caracterizan por tener ciertas propiedades y ciertos significados particulares que los obligan a ser diferentes del resto de números.

Para poder obtener dicho significado, debes unir los significados del número individual y de su reducción. De esta forma, tendríamos que:

1. INDEPENDIENTE

Eres el tipo de persona que tiene como característica número uno el ser dinámico y no depender de nadie, cuentas con buenas capacidades para aprovechar los pequeños detalles que te da la vida, siempre con decisión y voluntad.

Alcanzarás el éxito en el medio/largo plazo, ocupando puestos de gran responsabilidad. Eres muy racional y, aunque generalmente eres introvertido, puedes acabar convirtiéndote en un referente para los demás, serás alguien a quien acudirán para buscar consejo y coraje.

Gracias a tu espíritu independiente, siempre tendrás en mente iniciativas valientes que te permitirán trazar muchos proyectos llenos de pasión e ilusión, que acabarán fascinando a tu círculo de confianza.

2. SENSIBLE

Eres intuitivo, cordial y gentil; adoras la paz y la armonía, siempre te has sentido muy ligado a la familia y a las personas que amas, entre ellos a la pareja y tu circulo de amigos.

Debes estar atento a no dejarte manipular por los demás y aceptar todo sin rechistar. Eres muy receptivo, pero no demasiado aprensivo: el equilibrio es el punto medio entre ambos, y a través de esto puedes mostrar a los demás tu lado más simpático y amable.

En base a tu naturaleza emotiva, nunca actúas de forma impulsiva ni con mala intención. Una de tus mejores cualidades es casi siempre resultado de la meditación: la diplomacia aplicada, ese consejo que sabes dar a los demás mejor que nadie; aunque no seas la persona más sabia, siempre actuarás con justicia y magnanimidad.

Los quehaceres relacionados con la colaboración son los que más cómodo te hacen sentir, actuar por tu cuenta te activa ciertas barreras protectoras basadas en el miedo que casi siempre acaban impidiéndotelo.

3. EXTROVERTIDO/A

Si el número de tu alma es el 3, posees grandes cualidades: un cuidado sentido artístico y creativo, pero para exprimirlo vas a necesitar mejorar y creer más en ti mismo.

Tu naturaleza te convierte en una persona alegre, optimista y amante de la buena compañía; sientes la necesidad de contacto humano constante y de un trabajo que pueda permitirte satisfacer toda esta positividad que llevas dentro.

Tienes el don de la palabra, sabes manejarte con la retórica y disfrutas haciéndolo, eres capaz de motivar a los demás a ser mejores cada día.

4. CONSTRUCTOR/A

El cuatro es el número de la tierra y de los trabajos prácticos, por ello estás dotado de una fuerte voluntad que deberías usar de manera constructiva; además, posees un profundo sentido de la justicia.

Eres muy responsable y paciente, serio y metódico en el desarrollo de tus actividades; nunca actúas de manera obstinada porque tu fuerte tenacidad te permite superar las restricciones que puedas encontrar en tu camino.

Recuerda siempre añadir a tu determinación una pizca de creatividad, si lo haces habrás encontrado la fórmula del éxito.

5. BUSCADOR/A

Amas cambiar constantemente, la novedad te estimula porque tienes la necesidad dentro de ti de sentirte libre, de pensar y de actuar sin descanso.

Eres inquieto por naturaleza y odias la monotonía; te gusta la aventura y disfrutas comunicando tus historias.

Pero si no tomas las precauciones adecuadas, debido a tu naturaleza cambiante, puedes acabar convirtiéndote en una persona ofuscada, con toques infantiles y un nivel de irresponsabilidad que puede resultar irritante para los demás.

Por último, otro de tus puntos fuertes es tu rapidez para tomar decisiones que te concede una mejor percepción de la realidad y te ayuda a convertirte en una persona admirada por los demás.

6. ARMONIOSO/A

Eres un romántico idealista, el número 6 trae consigo un fuerte deseo de armonía dentro de sí.

También eres muy hogareño, lo cual te convierte en una persona amable y simpática, pero también práctica y responsable; por otra parte, también te caracterizas por tu faceta diplomática que no todo el mundo sabe apreciar en ti.

No eres para nada agresivo en el trato con los demás, de hecho, es algo que odias profundamente, y otro tanto para los celos, no te gusta sentirlos ni sufrirlos.

Siempre intentas adoptar una postura para nada conservadora con respecto a las ideas y a los gustos.

La mejora continua y las relaciones adecuadas serán el combustible que necesitas para desarrollarte como persona en total plenitud.

7. SABIO/A

Eres un investigador por excelencia, introvertido, místico y un apasionado de la filosofía.

Hablas poco y eres un gran observador, te caracteriza el individualismo y puedes llegar a ser un poco solitario, no te gusta el desorden y tienes una cierta necesidad de aislarte y sumirte en tu interior.

Vives atento a no huir con demasiada frecuencia de la realidad y optas por afrontar los problemas porque te van a perseguir igual.

El sentido del sacrificio es innato a tu personalidad, y suele venir acompañado de una gran creatividad. Déjate guiar por tu instinto interior.

8. ORGANIZADOR/A

El número 8 está estrictamente ligado a la organización. Sabes valorar a los demás, eres realista y ambicioso y sueles alcanzar tus objetivos a través del fruto del trabajo duro y de la constancia.

Necesitarás darle un fin correcto a tu sentido práctico, tratando de ser equilibrado y justo en cada decisión o acción. Debes prestar especial atención para no acabar convirtiéndote en una persona autoritaria, aprende a exprimir tus sentimientos.

Tienes buen ojo para los negocios, pero tienes una cierta necesidad de seguridad que te frena para comportarte como lo haría un inversionista.

El ocho es el número que relaciona tu alma con tu corazón, y que, por tanto, te permite hacer contacto inmediatamente con el estado de ánimo de los demás.

También eres una persona equilibrada en la mayoría de aspectos de la vida, no te gusta el riesgo, a menos que se trate de un asunto de negocios.

9. HUMANITARIO/A

El número 9 indica una personalidad altruista y humanitaria. Eres muy optimista y generoso, estas cualidades te ofrecen la energía para seguir creciendo como persona, convirtiéndote en un valor útil para la comunidad.

Otras de tus virtudes, son sin duda la confianza que transmites y la lealtad que procesas. Tus emociones no admiten una mentalidad cerrada o egoísta, en cambio sí que tienen lugar para la imaginación y el gusto por la aventura, que te van a permitir darle la vuelta a cada adversidad.

Otras de tus dotes son la compasión y la tolerancia. Éstas te permiten comprender ideas y situaciones en mucho menos tiempo, y de manera más eficaz que el resto de las personas.

Sientes la necesidad de libertad correr por tus venas, por ello te cuesta vincularte con personas o lugares por períodos largos de tiempo.